Se apagó la luz de tus ojos
Pero no tu alma que
Siempre vivirá entre nosotros.
Te fuiste a un lugar remoto
Dejando a tu amado esposo
Y tres hijos grandes y hermosos.
La última vez que nos vimos
Supe que morías y me negué
A darte un beso de despedida
¡Ingenua! Quería retrasar
Tu partida.
Hoy te decimos adiós
Aunque no así a mi heroína
Quien nos dejó un ejemplo
De amor y sabiduría.
Mi tía querida: moriste pobre
En una cama que no te pertenecía
Pero llena de un amor
En el que siempre estarás viva.
A la memoria de Luz Marina Barrera de Escalona † 25/11/2013
Que brille para ella la luz perpetua
y que descanse en paz. Amén
Deja una respuesta